Tecnologías de la información e industrias culturales.

Publicado en por nelly

El conjunto de avances tecnológicos que nos proporcionan la informática, las telecomunicaciones y las tecnologías audiovisuales, que comprenden los desarrollos relacionados con los ordenadores, Internet, la telefonía, los mas media, las aplicaciones multimedia y la realidad virtual. Estas tecnologías básicamente nos proporcionan información, herramientas para su proceso y canales de comunicación”. Cualquiera que sea la manifestación de las artes, si nos acercamos al fenómeno de la manera más particular, tiene en las (TIC´s) una herramienta imposible de soslayar si queremos marchar a la par de la modernidad, donde el uso de las mismas, su desigual distribución, favorece a las potencias mundiales y por ende a sus procesos culturales, fruto de una industria, una verdadera maquinaria que en su proyección exterior amenaza con desaparecer a las culturas nacionales de los países pobres, en real desventaja en esta feroz batalla global. Con el surgimiento de estos nuevos, modernos y contundentes medios de creación y difusión, apareció un temor inicial entorno a la posible, y en alguna medida pronosticada, desaparición de los formatos tradicionales; sin embargo, para sorpresa de algunos y reafirmación para otros, para suerte de todos y de la propia cultura, las (TIC´s) no han suplantado nada, por el contrario, contribuyen sobremanera a la difusión, a la promoción, al conocimiento, a la universalización de la cultura, a la participación, a la creación misma, aspectos bien aprovechados por los centros de poder, pero lamentablemente no siempre bien utilizados. Nos enfrentamos hoy a una problemática real, que va más allá de la existencia de las Tecnologías.

la industria  cultural y la transformación de los conflictos en las sociedades altamente  industrializadas. Como puede apreciarse, un concepto clave que introduce esta perspectiva es el de: Industria Cultural, término que sustituye al de “Cultura de Masas”, para eliminar el riesgo de que pueda interpretarse como una cultura que surge espontáneamente de las propias masas, como forma contemporánea de arte popular. La lógica industrial determina: la producción en serie (estandarización y masificación) y la imbricación entre producción de cosas y producción de necesidades.

 

 
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